que venga el día
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Instrúyanse, porque tendremos necesidad de toda vuestra inteligencia. Agítense, porque tendremos necesidad de todo vuestro entusiasmo. Organícense, porque tendremos necesidad de toda vuestra fuerza.
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Instrúyanse, porque tendremos necesidad de toda vuestra inteligencia. Agítense, porque tendremos necesidad de todo vuestro entusiasmo. Organícense, porque tendremos necesidad de toda vuestra fuerza.
25/2/22
EE.UU y el conflicto RUSIA - UCRANIA
7/12/21
NO COSAS, Byung Chul Han y EL CAPIALISMO
El escritor y ensayista Nicolás Mavrakis es autor de Byung-Chul Han y lo político
(Prometeo, 2021) donde recorre el pensamiento del famoso filósofo
surcoreano. Lleva años estudiando los vínculos entre la cultura
humanística y la tecnología digital en publicaciones como Una pregunta sobre internet (Letra Sudaca, 2017), Houellebecq, una experiencia sensible (Galerna, 2016) y #Findelperiodismo y otras autopsias en la morgue digital (Ediciones CEC, 2011).
--Según Byung-Chul Han, el mundo se vacía de cosas para llenarse de información: se descorporiza perdiendo la referencialidad y la facticidad. Los signos digitales, cada vez más, ya no representan a un objeto real. Y nos desmaterializamos como personas en dígitos: el “otro” va desapareciendo también. ¿Desde la perspectiva heideggeriana de Han avanzaríamos hacia una mayor pérdida del Ser?
--Sin dudas, el avance del “emplazamiento técnico” profundiza el olvido del ser. Nos reduce a la mera verdad del “ente”, cuya función en este “emplazamiento técnico” hoy liderado por Silicon Valley es demandar y consumir objetos, al punto tal que el hombre mismo se reduce a un objeto entre otros. Han menciona en este sentido la cuestión de la autoexplotación: “Ahora uno se explota a sí mismo y cree que está realizándose”. En No-cosas, estas premisas se afinan en una crítica precisa a algo que Heidegger intuyó pero no llegó a ver: el hecho de que, como escribe Han, “el mundo se torna cada vez más intangible”, lo cual no tiene tanto que ver con la melancolía por la materialidad de las cosas, sino con un eficiente traslado hacia la vida cotidiana de la lógica actual del capital. Este desarraigo del capital frente a toda acción económicamente productiva en beneficio de la pura financiarización especulativa lo vemos en marcha entre palabras vaporosas como “los mercados” o “las inversiones extranjeras”. Estamos hablando de ciclos financieros, no de ciclos productivos. Silicon Valley es un ejemplo de cómo se pueden crear las más grandes fortunas a partir de la especulación improductiva con “no-cosas” como los datos. Pero en este punto hay que recordar lo que Heidegger decía a través de Hölderlin: “Donde está el peligro, crece también lo que salva”. En la medida en que seamos conscientes de lo que pasa, es más probable que podamos reaccionar. Pero, ¿queremos reaccionar?
--El filósofo dice que las energías libidinales se apartan de las cosas para ir hacia las no-cosas: “nos hemos vuelto todos infómanos”, fetichistas de la información y no de las cosas. ¿Qué es un infómano?
--El “infómano” es la versión última del narcisista, cada vez más dependiente de lo que le da certezas afirmativas sobre el valor de sus opiniones, sus consumos y sus hábitos, expuestos a cada instante y sin sospechas de negatividad. Han repite una y otra vez que lo único que las redes sociales nos retribuyen a cambio del usufructo voraz de nuestros datos es narcisismo. Los “Me gusta”, los “corazones”, los “compartidos” y los “vistos” que intercambiamos no son más que narcisismo distribuido por usuarios que, al mismo tiempo, son cada vez más segmentados, filtrados y moldeados por la lógica narcisista de las redes. El círculo de confirmación mutua y celebratoria que nos repite que somos las mejores versiones posibles de nosotros mismos cierra a la perfección. Hay vidas, incluyendo carreras profesionales súbitas y exitosas, atadas a la reputación que se construye con el narcisismo digital.
--Sería el caso del derrumbe de la multinacional WeWork con el megalómano de Adam Neumann.
--Es un buen ejemplo. Tal vez Han no es tan popular en Twitter por señalar estas farsas. El punto es que el “fetichismo de la información y los datos” no es una conducta que se nos imponga por las malas, sino por las buenas.
--Han hace casi un llamado a aferrarnos al “orden terreno” compuesto por cosas físico-analógicas. Opina que lo firme y duradero estabiliza la vida, pero está siendo sustituido por el orden digital: cada vez más percibimos el mundo a través de pantallas y no tocamos las cosas. La mayor parte de la comunicación pasa por allí. El mundo va perdiendo solidez y “se torna cada vez más intangible, nublado y espectral... El smartphone irrealiza el mundo”. ¿Por qué lo alarma tanto a Han el que los dispositivos se estén devorando el mundo?
--Acá podríamos dar vuelta la pregunta: ¿por qué no nos alarma tanto a nosotros que los dispositivos se estén devorando al mundo? Hay una zona en la argumentación de Han a la que se puede atacar por buenas razones. Porque son ideas que nos enfrentan al hecho de que nuestra propia identidad, a pesar de lo que muchas veces nos gustaría creer, es menos maleable, mutable y transformable que lo que pensamos, y por eso no podemos evitar ser cómplices conscientes del sistema. Ahora bien, cuando Han habla acerca de dispositivos como el teléfono inteligente, lo que se cuestiona es nuestra complacencia irrestricta a un sistema de explotación que nos riega con narcisismo. Si creemos que Han sólo está contra los teléfonos, nos queda la caricatura de un pesimismo anacrónico que, además, convalida nuestra propia fantasía autocomplaciente acerca del libre dominio que creemos tener sobre los objetos técnicos del siglo XXI. Pero Han no está contra los teléfonos inteligentes por lo que son, sino por lo que hacen y representan. Lo dice con claridad: el teléfono profundiza el cautiverio en un sistema que sólo nos da libertad para optar entre elecciones preestablecidas y consumos, pero empantana toda acción concreta. Gran parte de lo que consideramos “activismo político” no es más que una inútil “indignación digital”. Pero Han dice algo más: lo único “inteligente” del teléfono inteligente es que gracias a la complacencia narcisista con la que nos nutre cada interacción digital, este “capitalismo del Me gusta” no tiene que temer ninguna resistencia. Es la permisividad del “capitalismo del Me gusta” lo que anula cualquier confrontación. Fastidia un poco el hecho de que Han lo diga sin vueltas porque esto es un ataque directo a nuestro narcisismo, de repente asediado por el hecho de que aunque Silicon Valley nos haga creer que somos emperadores, estamos desnudos.
--Para Han, nos estamos “mudando” a la infósfera, donde no necesitamos las manos: el hombre del futuro “ni siquiera se dará cuenta de que no usa las manos”. Los trabajos físicos tienden a hacerlos máquinas y robots. Empuñamos el mouse o apretamos un botón y todo arranca. Aunque esas interfaces tienden a desaparecer ante los comandos de voz. Dice el filósofo que Heidegger parece haber intuido que el ser humano no tendría manos y que en lugar de trabajar, se inclinaría a jugar. El análisis de la mano por Heidegger puede usarse hoy como defensa del orden terreno frente al digital. Aquel pensador distinguía la mano de los dedos: en el uso de la máquina de escribir solo intervenían las yemas y esto “retira al hombre de la esfera esencial de la mano”. Plantea que es la mano la que nos abre el mundo circundante. La mano que toma la cosa, la experimenta más originalmente que la mera visualización. Martillar es lo que mejor nos descubre el martillo: la mano es la que tiene acceso a la esfera original del ser. Y la existencia humana hace pie en tierra: el pie para Heidegger representa la estabilidad del suelo que conecta al hombre con la tierra que le da sostén. Las manos y los pies nos ligan al orden terreno. Concluye Han: “El hombre sin manos del futuro es también un hombre sin pies. Abandona flotando la tierra hacia la nube digital”. ¿Qué es “el hombre sin manos que teclea”?
--Esto vuelve a la cuestión de cómo Han retoma ideas de Heidegger acerca de la técnica. Un punto importante es qué significan las “cosas” para Heidegger. En el contexto de Ser y tiempo, las “cosas”, en tanto que instrumentos, establecen la mundanidad del mundo: nos muestran que hay ciertos fines y efectos posibles, y el modo en que los empleamos definen tal o cual proyecto. Es por esto que el modo en que el hombre, como Dasein, decide qué hacer con estos instrumentos, define su sentido en términos de “efectividad de la existencia”. Pensemos en una “cosa” conocida como la noche. La noche ya no existe. Silicon Valley la está aboliendo con el “scrolling” hipnótico en redes sociales y el “binge watching” (las maratones de series). Para los trabajadores de la seguridad informática, hace un buen rato que no existe tal cosa como la noche porque internet nunca se apaga. Como sea, lo que Heidegger dice es que la relación inicial del hombre con el sentido del ser se da a partir de su alcance de las cosas, ¿pero qué pasa si las cosas se disuelven en bytes? Heidegger intuía que la “tierra”, aquello propio que fundamenta un arraigo inalienable, también quedaría dentro de la esfera de la “maquinación” y su mundo de puras ganancias y beneficios. A partir de ahí, si hoy usamos las manos, los dedos, la mirada o el pensamiento para controlar los dispositivos, no son más que tecnicismos. De lo que se trata es del desarraigo de todas las instancias conocidas de lo humano. Por supuesto, uno lee esto y no puede menos que pensar en el chasquido del guante de Thanos, el personaje de Marvel, pulverizando a la humanidad. Y esto puede ayudar a encasillar a Han como un oscuro nihilista. Sin embargo, él no describe algo que va a pasar, sino algo que está pasando. Esto es lo inquietante.
--Han concluye que “nos encaminamos hacia una era trans y poshumana de información. La digitalización es un paso consecuente en el camino hacia la anulación de lo humano”. Y habla de una pérdida del mundo. No sé si estamos ante la “pérdida del ser” en lo que respecta al humano. Se lo puede ver como evolución, cambio del ser, mutación no biológica sino tecnológica, buscada y consciente: la consolidación del cyborg. Vivimos rodeados de tecnología, los dispositivos se nos adosan al cuerpo y van entrando en la piel. También la percepción ha cambiado y nadie puede detener eso.
--¿Las redes no riegan nuestro narcisismo con reconocimientos virtuales en la medida en que contamos todo el tiempo lo que sentimos? ¿Y lo que sentimos no es casi siempre lo opuesto del pensar? Y si nuestro narcisismo es recompensado por sentir en lugar de pensar, ¿no tiene mucho sentido que en las redes haya una total ausencia de negatividad? Apenas asoma la negatividad, se la bloquea, silencia, deja de seguir o se la “cancela”. Y sin negatividad, dice Han, no hay lenguaje ni entendimiento. Como buen romántico, Han no propone qué hacer frente a la época, sino que simplemente se opone al “deber ser” de la época. No es poco. Y es, además, una posición crítica astuta: evade una discusión con el único filósofo contemporáneo al que nunca menciona en sus libros, el alemán Peter Sloterdijk. Sloterdijk explica que la esencia del hombre no ha sido nunca otra cosa que la técnica, y por eso oponerse a los gigantescos saltos tecnológicos no significa proteger al hombre de nada, sino negar lo que es: esa artificiosidad que llamamos “transhumanismo”.
--Para Han, el “Phono sapiens descubre la comunicación como su campo de juego. Es más Homo ludens que Homo faber”. ¿Qué significa esto?
--Han dice que el Phono sapiens, un hombre ligado en cuerpo y alma a su teléfono inteligente, deja de “actuar” ante el mundo y abandona el estado de Homo faber para convertirse en un Homo ludens, que es algo así como un hombre que, tal como ocurre en un juego, se limita a seguir reglas establecidas por otro para cumplir objetivos ajenos. ¿Y a cambio de qué? De gratificación narcisista. Han habla de un futuro cercano hecho de renta básica universal y juegos de video. La verdad, no creo que sea algo tan lejano de los planes de Mark Zuckerberg a partir de su presentación de Meta.
--Han parece renegar del smartphone: creo que ni tiene uno. Esa suerte de nostalgia analógica parece algo ingenua y conservadora. Para la acción política se necesita el smartphone: imaginemos el feminismo sin la ayuda práctica de redes sociales para las movilizaciones. El smartphone es una tecnología como las demás: su sentido está abierto, no viene dado. Renunciar a él sería renunciar a la política. Es evidente que se está convirtiendo en un opio, que potencia la fragmentación perceptiva y la pérdida de sentido, que nos tiene trabajando gratis para nuevos señores feudales digitales alimentando el big data, que diluye la “era de la verdad” dando paso a la sociedad posfactual de la fakenews, que es un campo de trabajo móvil y un informante que nos monitorea: nos sentimos libres y nos delatamos en un confesionario móvil. Es una herramienta de la derecha mundial, pero no podemos cedérsela en exclusividad. No está completo el diagnóstico si lo consideramos solo eso, puro veneno. Un arma puede servir para oprimir o liberar.
--Es un error pensar que el sentido de la tecnología está abierto y no viene dado. De hecho, el sentido de la tecnología sí viene dado, no está abierto y no es otro que la expansión del mundo en el que tal sentido es posible. Es lo que Heidegger llamaba “la esencia de la técnica”. Los usos de un teléfono pueden variar, pero su esencia no está abierta a discusión. Con menos filosofía y más pragmatismo: estamos hablando de la expansión de la lógica existencial del neoliberalismo. Lo mejor que podemos hacer es conocer esa esencia de la técnica para alcanzar una relación más “serena”. Aun así, tampoco creo que el smartphone haya ayudado a la emancipación de nada ni nadie. Toda adquisición de derechos es fruto del trabajo de la política, es decir, de los mecanismos y las convicciones de la política y de la sociedad que la interpela. Tuitear en favor de la vida o contra los incendios forestales nunca le salvó la vida a nadie ni apagó una sola hoja en llamas. En internet no hay ninguna libertad ni algún orden constitucional que garantice nada. Estas ilusiones son el subproducto de un negocio y de un modelo de vigilancia, nada más. Aun así, no se trata de apagar nuestros módems y tirar los teléfonos. Han no llama a pensar desde la negación sino desde la negatividad, es decir, desde cierto entendimiento crítico que pueda relampaguear en nuestra mente mientras madrugamos repartiendo “corazoncitos” en Instagram creyendo que nada tiene mayor sentido.19/8/21
El manifiesto de Aaron Swartz
Es muy posible que usted haya escuchado hablar o sepa quien es Edward Snowden (1), lo que hizo y por qué está refugiado en Rusia y no vive en su país de origen, Estados Unidos. Pero es muy poco probable que haya escuchado hablar de Aaron Swartz (2). Como me interesa (mucho) que lea el manifiesto que escribió en julio del año 2008, en Italia, sólo voy a escribir algunos detalles de su biografía. Para fijar las ideas: Aaron Swartz nació en Highland Park, una ciudad pequeña pero donde vive gente de muy alto poder adquisitivo, unos 30 kilómetros al norte de Chicago, en Estados Unidos. Nació el 8 de noviembre de 1986 y se suicidó el 11 de enero del 2013, con 26 años, en Brooklyn, uno de los barrios de New York.
Swartz fue una suerte de prodigio que quiso socializar el conocimiento. Programador (fue uno de los fundadores de la muy famosa Reddit), escritor y me cuesta un poco de trabajo definirlo como hacker, pero, en un momento determinado, aprovechando su extraordinaria capacidad en temas de computación, logró ingresar en la biblioteca digital del MIT (el Instituto de Tecnología de Massachusetts) y comenzó a bajar todos los archivos allí almacenados y los difundía públicamente. En algún sentido Swartz (3) fue el primero que habló, escribió y programó en lo que hoy conocemos como criptomonedas, criptografía, blockchain, bitcoins, ethereum, etc.
El gobierno norteamericano ha perseguido históricamente no sólo a Snowden o a Julian Assange, sino que mucho antes, el target preferido fue Aaron Swartz y si me permite el atrevimiento, creo que les interesaba más capturar a Swartz que a Bin Laden. Finalmente fue arrestado el 6 de enero del año 2011 acusado de fraude electrónico, informático, y sobre todo por haber descargado publicaciones académicas para que después pudieran ser leídas por cualquier persona sin tener que pagar ningún tipo de derecho.
El FBI y los fiscales federales lo acusaron de tantos cargos que la pena que le correspondía era de un millón de dólares, pasar ¡35 años de prisión!, incautación de bienes, indemnización, y más.
Mientras se producía el juicio con múltiples apelaciones, Aaron Swartz se suicidó en un pequeño departamento en donde vivía en Brooklyn, pero los 26 años que vivió le alcanzaron para ser incluido por sus aportes extraordinarios en el Salón de la Fama de Internet en junio del año 2013. Ahora sí, con estos antecedentes brevísimos, le pido que no abandone y lea el manifiesto que publicó en el año 2008 con el título Guerilla Open Access (“La Guerrilla por el Acceso Gratuito”). Verá que vale la pena.
El manifiesto de Aaron Swartz
“La información es poder. Pero como todo poder, hay quienes quieren quedárselo para sí mismos. Todo el patrimonio científico y cultural del mundo, publicado durante siglos en libros y revistas, está siendo cada vez más digitalizado y guardado por un puñado de empresas privadas.
¿Quiere leer los artículos que presentan los resultados más famosos de las ciencias?Deberá enviar cantidades enormes a editores como Reed Elsevier (4). Hay quienes luchan/luchamos por cambiar esto. El Movimiento de Acceso Abierto ha luchado valientemente para garantizar que los científicos no firmen sus derechos de autor, sino que se aseguren de que su trabajo se publique en Internet, en condiciones que permitan a cualquiera acceder a él.
Pero incluso en los mejores escenarios, su trabajo solo se aplicará a lo que se publique en el futuro. Todo (lo publicado) hasta ahora se habrá perdido. Ese es un precio demasiado alto a pagar.
- ¿Obligar a los académicos a pagar dinero para leer el trabajo de sus colegas?
- ¿Escaneando bibliotecas enteras pero solo permitiendo que la gente de Google las lea?- ¿Proporcionar artículos científicos a los de las universidades de élite del Primer Mundo, pero no a los niños del Sur Global?
Es indignante e inaceptable. 'Estoy de acuerdo', dicen muchos, 'pero ¿qué podemos hacer? Las empresas poseen los derechos de autor, ganan enormes cantidades de dinero cobrando por el acceso, y es perfectamente legal; no hay nada que podamos hacer para detenerlos'.
Sin embargo, hay algo que podemos hacer, algo que ya se está haciendo: podemos contraatacar.
A aquellas personas con acceso a estos recursos (estudiantes, bibliotecarios, científicos) se les ha otorgado un privilegio. Si tú eres uno de ellos, tú tienes la oportunidad de alimentarte en este banquete de conocimiento mientras para el resto del mundo está bloqueado.
Pero no necesitas -de hecho, moralmente, no podrías- conservar este privilegio para vos mismo, únicamente para vos. Tienes el deber de compartirlo con el mundo. Lo que tienes que hacer es: intercambiar contraseñas con colegas, completar solicitudes de descarga para amigos.
Mientras tanto, los que han sido excluidos no deben quedarse de brazos cruzados. Hasta aquí, han estado escabulléndose por los agujeros y trepando vallas, liberando la información encerrada por los editores y compartiéndola con sus amigos. Pero toda esta acción transcurre en la oscuridad, escondida bajo tierra. Se llama robo o piratería, como si compartir una gran cantidad de conocimientos fuera el equivalente moral de saquear un barco y asesinar a su tripulación. Pero compartir no es inmoral, es un imperativo moral. Solo aquellos cegados por la codicia se negarían a permitir que un amigo hiciera una copia. Las grandes corporaciones, por supuesto, ellas están cegadas por la codicia.
Las leyes bajo las cuales operan así lo exigen: sus accionistas se rebelarían por algo mucho menor que esto. Y los políticos han sido comprados, aprobando leyes que les dan el poder exclusivo de decidir quién puede hacer copias.
No hay justicia en seguir leyes injustas. Es hora de salir a la luz y, en la gran tradición de la desobediencia civil, declarar nuestra oposición a este robo privado de la cultura pública. Necesitamos acceder a la información, esté almacenada donde sea, hacer nuestras copias y compartirlas con el mundo. Necesitamos tomar las cosas que no tienen derechos de autor y agregarlas al archivo. Necesitamos comprar bases de datos secretas y ponerlas en la Web. Necesitamos descargar revistas científicas y subirlas a redes de intercambio de archivos. Necesitamos luchar por Guerrilla Open Access.
Con suficientes de nosotros en todo el mundo, no solo enviaremos un mensaje contundente en contra de la privatización del conocimiento, sino que lo convertiremos en una cosa del pasado. ¿No te querés sumar?”
Aaron Swartz, julio de 2008, Eremo, Italia (5)
fuente:
Aaron Swartz: un prodigio que quiso socializar el conocimiento(1) https://es.wikipedia.org/wiki/Edward_Snowden
(2) https://es.wikipedia.org/wiki/Aaron_Swartz
(3) Este es el artículo sobre encriptación que el gobierno norteamericano no quería que fuera público. Ahora, obviamente, gracias a Aaron Swartz, ya lo es: https://groups.csail.mit.edu/mac/classes/6.805/articles/money/nsamint/nsamint.htm
(4) Reed Elsevier: https://www.referenceforbusiness.com/history2/81/Reed-Elsevier-plc.html
(5) La vida de Aaron Swartz se puede ver en este documental: https://www.youtube.com/watch?v=M85UvH0TRPc&feature=youtu.be
2/1/21
MEMORIA Y FUTURO
Cada uno de nosotros hace cuentas de pasado y conjetura un álgebra posible del futuros. Por nuestra cabeza pasa un loop los momentos álgidos, celebratorios y tristes. Todos entremezclados. Todxs brindamos por seres queridos. Algunxs, antes de la hora señalada, pasan frente a algún espejo para hablarse en la intimidad de lo que necesitan silenciar o no se atreven a compartir...
13/10/20
¿HUYAMOS... Hacia la DERECHA?
- Las explicaciones fluyen como si de un jubilado sentado en el banco de la plaza vinieran, pero no son aceptables si quien las enuncia es el Presidente, porque millones de compatriotas tienen hambre, lo pasan muy mal, sin embargo sólo se atienden las demandas de la clase media...
26/7/20
HÉCTOR GERMÁN OESTERHELD, EL ETERNAUTA
Un coleccionista de sonidos de Mar del Plata, compra unas cintas y las escucha para encontrar tesoros, perlitas, notas o reportajes de personalidades de distintas épocas.
Es su hobby.
De pronto descubre un reportaje que le hacen a Héctor Germán Oesterheld, y lo selecciona y aparta.
Busca el teléfono de sus nietos Martín Miguel Mórtola y Fernando Araldi y los llama dándoles la nueva.
¡Apareció un reportaje a su abuelo! (se entusiasmó)
¡Es que hay muy pocos registros de la voz de Héctor!
8/6/20
EL DESASTRE PERFECTO según NAOMI KLEIN
La periodista Naomi Klein, autora de libros como «No Logo» y «La doctrina del shock», analiza en esta entrevista con Vice las especulaciones en torno a la pandemia, el rol de Estados Unidos y cómo salir de la emergencia diaria para pensar más acá de la vida:
«Lo que un momento de crisis como este revela es la interrelación entre nosotros. En lugar de acaparar y pensar en cómo puedes cuidarte a ti mismo y a tu familia, puedes hacer un cambio y pensar en cómo compartir con tus vecinos y ayudar a las personas que son más vulnerables».
25/5/20
BOUDOU: "CUANDO PASE EL TEMBLOR"
10/5/20
LOS DUEÑOS DE LA GRIETA
En las primeras semanas de la cuarentena, cuando el temor a contagios y a muertes masivas por el coronavirus dominaba el espacio público, hubo un clima de tenue convivencia política con los poderes fácticos.
Con la pandemia hubo una tregua inicial sobre la disputa estructural que existe acerca del rumbo de la sociedad argentina, vulgarizada con la palabra "grieta".
En esa breve pausa, con la comunión de aplausos en los balcones a las 21 horas, las palabras solidaridad, unión y colaboración se repetían en medios de comunicación. Había una sociedad de intereses con el objetivo de cuidarse para cuidarnos entre todos.
¿Qué sucedió a los pocos días para que se alterara esa alianza social? ¿Por qué se volvió a agitar "la grieta"? ¿Por qué medios, analistas y políticos conservadores volvieron a intervenir en el espacio público con una elevada carga de violencia simbólica?
1/5/20
RAMONET: CAPITALISMO Y PANDEMIA
Coronavirus: La pandemia y el sistema-mundo
Todo está yendo muy rápido. Ninguna pandemia fue nunca tan fulminante y de tal magnitud. Surgido hace apenas 100 días en una lejana ciudad desconocida, un virus ha recorrido ya todo el planeta y ha obligado a encerrarse en sus hogares a miles de millones de personas. Algo sólo imaginable en las ficciones post-apocalípticas…
A estas alturas, ya nadie ignora que la pandemia no es sólo una crisis sanitaria. Es lo que las ciencias sociales califican de «hecho social total», en el sentido de que convulsa el conjunto de las relaciones sociales, y conmociona a la totalidad de los actores, de las instituciones y de los valores.
20/4/20
AMADO BOUDOU: "CONSTRUIR UN NUEVO ORDEN MUNDIAL"
También comprendamos que los sectores más vulnerables están desprovistos de recursos para enfrentar tanto la pandemia como la vida diaria mientras dure esta situación.
Por favor, hacia ellos los mayores esfuerzos.
La desigualdad sigue siendo el problema más grave de las sociedades y en circunstancias extremas se hace más visible...
13/4/20
MAURIZIO LAZZARATO: "El Capital Odia a Todo el Mundo"
En El capital odia a todo el mundo (Eterna cadencia), el sociólogo y pensador italiano Maurizio Lazzarato establece un debate profundo al interior de las corrientes filósoficas y biopolíticas que empezaron a generarse en el llamado pensamiento del 68. Plantea que en la actualidad no se trata de retomar lisa y llanamente el concepto de lucha de clases, sino entender que vivimos una era de luchas de clases, en sentido plural. En esta entrevista exclusiva Lazzarato evalúa la realidad mundial con énfasis en los países del sur sur y la evolución de la pandemia si se la dejara librada a la economía de mercado...
11/3/20
BIFO: "LA ERA DEL SUFRIMIENTO"
Franco Bifo Berardi combina la docencia como profesor de historia social de los medios de comunicación en la Academia de Bellas Artes de Brera (Milán) con la agitación cultural: creó el fanzine A/Traverso, Radio Alice —la primera emisora pirata de Italia— y la TV Orfeu, cuna de la televisión comunitaria en Italia.
En sus libros indaga cómo las tecnologías digitales están generando una mutación del ser humano y aceleran de forma tan vertiginosa el tiempo que no deja tiempo para la pausa, la escucha o la capacidad crítica ponderada. Cartografía un tejido social en el que, como en las shitstorm [una tormenta de mierda] de las redes sociales, los individuos se mueven por los estímulos de todo tipo que reciben sin tiempo para reflexionar, y donde reina el resentimiento identitario, la desertificación del pensamiento complejo y el autismo coral...
13/2/20
EL PENSAMIENTO DE SAMIR AMIN
Samir Amin, economista mundialmente conocido, explica la razón de la condición decadente de la economía moderna y da la receta de la salvación del imperialismo global...
20/10/19
EL DISCURSO DE LA DERECHA
La ofensiva que lanzó el propio Mauricio Macri desde su estrado en el “debate” presidencial del domingo pasado no fue espontánea, ni menos aún vinculada a la disputa electoral coyuntural.
La partitura fue escrita hace rato, pero ha sido necesario remozarla debido al cambio dramático que introdujo Cristina Fernández cuando anunció el lanzamiento de la candidatura presidencial de Alberto Fernández.
La partitura sostiene que el kirchnerismo es autoritario, antirrepublicano, peligroso para la libertad y la propiedad y filo-chavista. Y chorro, para la gente menos ideologizada...
12/6/19
"SE ROBARON TODO" Y OTROS MITOS INVENTADOS
- “El gobierno de Macri convirtió el cinismo en una forma de gestión”.
- • La política comunicacional de Cambiemos, dice el sociólogo Saúl Feldman, capturó el sentido común para imponer un nuevo sistema de valores.
- “Hay que oponerle una emocionalidad distinta, anclada en lo colectivo.”
10/6/19
MACRI Y EL SUBSUELO
La realidad económica es más previsible que la política. Tal como se escribió no solamente en este espacio, la reconstrucción del mega endeudamiento en moneda extranjera llevó primero a una crisis externa y a la recaída en el FMI y luego, con el Fondo adentro, a la vuelta de tuerca sobre el programa ortodoxo que condujo a la economía al subsuelo dónde hoy se encuentra...
20/11/18
«Poor We Do Not Want»
En mis clases siempre intento dejar claro qué es una opinión y qué un hecho, como regla elemental, como un ejercicio intelectual muy simple que nos debemos en la era post Ilustración. Comencé a obsesionarme con estas obviedades cuando en el 2005 descubrí que algunos estudiantes argumentaban que algo “es verdad porque yo lo creo” y no lo decían en broma. Desde entonces, sospeché que este entrenamiento intelectual, esta confusión de la física con la metafísica (aclarada por Averroes hace ya casi mil años) que cada año se hacía más dominante (la fe como valor supremo, aun contradiciendo todas las evidencias) provenía de las majestuosas iglesias del sur de Estados Unidos...
3/11/18
FMI, FAKENEWS y LAWFARE
“Ora, sou um ser humano, portanto, não sou perfeito” dijo Onyx Lorenzoni cuando todavía era diputado federal y admitió haber recibido una coima de cien mil reales. En el nuevo gobierno de Brasil, Lorenzoni será el ministro de la poderosa Casa Civil, según ya fue anunciado, aunque el derechista Jair Messias Bolsonaro se jactaba de que en su gobierno no habría corruptos...
28/8/18
LA SEGUNDA RESISTENCIA
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Dado el incalculable daño causado a la República por este gobierno, la verdad es que la respuesta popular ha sido hasta ahora muy prudente. El desastre económico y social (hambre, desempleo, destrucción del sistema productivo y provisional, y de la educación, salud y ciencia) ha alcanzado niveles que jamás nadie imaginó. Pero el presente ominoso que vivimos -siendo doloroso y desalentador- no por eso ha vencido al pueblo argentino ni mucho menos.
Y tampoco lo doblega el circo periodístico, pletórico de fotocopias dudosas y sin pericias caligráficas, que ofrece arrepentimientos insinceros arrancados a fuerza de chantaje judicial. Con lo que las “confesiones” son truchas porque los dizque “arrepentidos” son corruptos perdonados a cambio de acusaciones verbales y sin pruebas, como si el deshonor se lavara con el agua bendita de Comodoro Pro. Y encima no deja de ser llamativo que en la lista de empresarios coimeros que se autoincriminan diariamente ante el sergiomoro argentino sigue sin ser citado el Sr. Franco Macri. Ausencia más que notoria, impresionante. A menos que sea el único hiperempresario que jamás ofreció ni cobró una coima.
Pero sí es verdad que la organización de la oposición se ha demorado, en parte por la velocidad, audacia y heterodoxia con que el oficialismo impone decisiones, a la vez que siembra cizaña y miente con descaro. No obstante lo cual, aunque llevó más tiempo del deseado, la organización popular empieza a ser visible.
Obviamente no es un proceso concluído y su evolución es lenta y probablemente será dolorosa, porque el más grave daño moral infligido a la república por este gobierno es el odio que instalaron, que es un odio de clases, un odio gorila que genera resentimiento en los subsuelos de la Patria y hoy opera con la misma ferocidad que en los bombardeos criminales de otros odiadores, los de junio de 1955, que de hecho son los mismos, reciclados, porque estos son hijos y nietos putativos de aquellos oligarcas, igualmente corruptos y violentos.
Por eso quizás sea pertinente hablar de una Segunda Resistencia. Que, como hace décadas, se está gestando y será una tromba, aunque quizás todavía no se vea clara porque aún es tiempo de apechugar y tomar impulso.
Quizás muchos jóvenes ignoren qué fue la Resistencia Peronista, nombre con el que la Historia Argentina recuerda el enfrentamiento a las dictaduras y gobiernos civiles instalados a partir del golpe de estado que el 16 de septiembre de 1955 derrocó al gobierno constitucional de Juan Domingo Perón. Hasta el 25 de mayo del 73, cuando una gran victoria electoral llevó a la presidencia a Héctor J. Cámpora, fueron 18 años de lucha contra todos los gobiernos instalados mediante golpes de estado y elecciones con el peronismo proscripto.
Si hace décadas aquella Resistencia -que fue sindical, estudiantil, juvenil, barrial y cultural e incluso religiosa- tenía por objetivo el regreso de Perón al país y la realización de elecciones libres y sin proscripciones, la de hoy puede y debe ser mejor. Porque ya no es sólo peronista, ni kirchnerista solamente, sino que ahora hermana a todo el pensamiento nacional y popular, incluyendo a los muchos radicales que no se doblaron, a los socialistas de buena memoria que honran a Alfredo Palacios, a las organizaciones de la izquierda nacional y a decenas de colectivos que se plantan día a día frente a la canalla neoliberal, reclamando de manera pacífica el fin de este oscuro período de latrocinio y odio.
Es un pueblo el que se está plantando frente a los nuevos dictadores de este tiempo miserable. Es tiempo de optimismo, entonces, si como pensamos la Segunda Resistencia ha comenzado. Fragmentada y pacífica, pero consistente, ya se la ve en las calles, los muros, las fábricas, las plazas, los puentes. En el repudio y la puteada cada vez más sonoros. En los maestros y ahora en los estudiantes, una vez más vanguardia de resistencia. El universo sindical que con excepciones tiene vocación retardataria, se sumará más temprano que tarde. Y todo en paz, esta vez sin más armas que las ideas y principios libertarios, la convicción democrática y el anhelo de justicia, soberanía, trabajo y dignidad. Y con el sentimiento patriótico renovado, para enfrentar al coloniaje.
Esta Segunda Resistencia convoca a militantes de todos los orígenes, hermanados en el repudio a la mafia ejecutivo-judicial y en la comprensión de que el centro y eje de la cuestión pasa por una nueva Constitución Nacional. Lo que es buenísimo, más allá de que algunos lo celebren como si descubrieran el dulce de leche. En esta columna lo afirmamos muchas veces: desde el mismísimo 27 de abril de 1956, cuando por un así llamado “bando revolucionario” los dictadores de entonces anularon la CN más democrática, social e igualitaria de nuestra historia (la de 1949), hubo memoria por lo menos en juristas como Jorge Cholvis y Eduardo Barcesat, y ahora también en un colectivo de ciudadanos notables, entre ellos Raúl Zaffaroni, Julio Maier, José Massoni y muchos más que trabajamos por una nueva Constitución.
Que es un camino largo pero inexorable, desde ya, porque replantea todo, como señala El Manifiesto Argentino desde 2002: que la salud, la educación y la previsión social son irrenunciables, indelegables e innegociables. Que las políticas sociales son derechos. Que los únicos monopolios deben ser para defender recursos naturales, servicios públicos sociales y desarrollo de áreas estratégicas. Que los recursos naturales en todo nuestro territorio, en superficie y en subsuelo, son también irrenunciables, indelegables e innegociables, y no serán jamás garantía de endeudamientos o negociaciones financieras, y se anulará toda extranjerización. Que la soberanía será de doble carácter Nacional y de Unidad Latinoamericana, y que desde esa concepción la Argentina promoverá la paz con paz y no se integrará a políticas guerreristas internacionales. Que los derechos históricos, geográficos y jurídicos sobre las Islas Malvinas son inclaudicables. Y entre muchas otras disposiciones, que la transparencia de todos los actos públicos y/o de gravitación social será Política de Estado -de una buena vez- y se caracterizará por el control, lucha y castigo de toda forma de corrupción, para lo cual es prioritario -ab initio e in totum- declarar en comisión a todo el Poder Judicial.
Como toda resistencia política, pacífica y patriótica, es difícil pero es posible.. Y sobre todo es urgente y necesaria.
→ ¿Cuál es el Plan, qué Programa levantaremos?
- ☼ El 1º Plan QUINQUENAL y el 2º Plan QUINQUENAL
- ☼ La CONSTITUCIÓN del 49, que se irá perfeccionando con intervenciones de todo tipo, principalmente las del movimiento obrero, a través del tiempo.
- ☼ El aporte gigantesco del Movimiento Obrero con el Programa de LA FALDA (agosto 1957)
- ☼ El Programa de HUERTA GRANDE (junio de 1962)
- ☼ El Programa de la CGT de los ARGENTINOS (mayo 1968), que en sí, constituye una continuidad de lo enunciado en La Constitución de 1949
Hoy, toda NUESTRA HISTORIA de PLANES, la CONSTITUCION y los PROGRAMAS PERONISTAS, se ACTUALIZAN en 27 PUNTOS del PROGRAMA DE LA CORRIENTE FEDERAL DE TRABAJADORES – CGT
Con el pueblo movilizado, para empezar la discusión sobre el plan, con el objetivo a llevar adelante para tener el país que queremos.
NECESITAMOS UN PROGRAMA PERONISTA