Videla le dio Papel Prensa al Grupo Clarín. Menem le dio Canal 13. Duhalde le otorga la Ley Clarín de Protección a los Bienes Culturales que impedía que grupos extranjeros embargaran al oligopolio. Duhalde pesifico las deudas y de la mañana a la noche pasaron de deber mil 1.500 millones de dólares a deber 1.500 millones de pesos.
Mis semáforos noticiarios en Clarín son todos rojos, nunca me pude ganar un amarillo o un verde.
Todas las tapas de Clarín que tuve fueron para denostarme o para ponerme bajo sospecha. Un lacayo del grupo llamado Pablo Abiad escribió mas de treinta notas demonizando la protesta en la comisaría por el asesinato del “Oso” Cisneros. Antepusieron todas las voces que pudieron de los derechos de los chóferes de autos, propietarios todos, a los derechos de los niños de los arrabales pobres que piden comida. La clase política argentina vive subordinada a los designios de Clarín, mucho mas que a la Constitución Nacional. Parecería que hay que predicar el masomenismo crónico, la ambigüedad, el relativismo ético, al que nos tiene acostumbrado cada tarde con cara de poker “Llanto Falsati”, como lo rebautizara el inefable Negro Fontova.
Para Clarín los pobres son objeto de caridad y nunca sujetos de justicia. Ell paradigma de las políticas sociales de la Fundación Noble es la Red Solidaria que dirige Juan Carr.
Sus estereotipos comunicacionales son blancos, flacos, lánguidos, centristas, dueños de una abominable falsa moderación. Sus economistas, acérrimos defensores de Cavallo en los 90, fueron recargando el inconsciente colectivo con la amarga carga de inexorabilidad con la que sucumbimos en los 90.
Para Clarín, con Tompkins invadí la propiedad privada, con el asesinato de Martín Cisneros tomamos una comisaría, con los piquetes del hambre nos enrostraban que violábamos el derecho de los automovilistas, con Irán se enfurecían porque le pisábamos los callos al imperio, con Palestina se indignaban porque denunciábamos la barbarie. Usurpador, suburbano, antisemita, violento, sospechoso, patotero, bah piquetero. Ese es el imaginario que construyeron de mí y de los míos “el gran diario argentino”. Con cuanto boludo me he encontrado en las calles y en los blogs, que manipulado por este nuevo ejercito de ocupación imperial me agredía desde su prejuicio de pequeño burgués.
Clarín refleja claramente el rollo cultural de los sectores medios y define claramente quienes estamos adentro y quienes estamos afuera.
Hay un apellido que no se puede nombrar, a no ser que te eches encima a todos los rottweiler del grupo. Ese vocablo huele a escepticismo político, a cannabis, a efedrina, a corruptela, a banda y a patota. Es un término repetido allá por Lomas de Zamora y que estuvo muy vinculado al vaciamiento de las personas, del Estado y de la política, en la segunda década infame de nuestra historia que fueron los 90. Si uno menciona ese apellido podes ser maltratado por Marcelo Bonelli, por Maria Laura Santillán o por Sergio Lapegüe (hijo del General Lapegüe, aquel famoso número 2 del General Bussi en Tucumán). Con esta ayudita de sus amigos el cipayo vocero de la embajada norteamericana en Argentina seguirá con fina retórica auspiciando finales, pontificando medias verdades y traficando conceptos con los cuales Lacan se haría un picnic.
Finalmente las 200 lucas que hoy gana hace que el vocero del grupo, becario de Princenton, haya cultivado el arte de querer explicar lo inexplicable en nombre de conceptos que solo atisban de manera mediocre a defender consensos y estilos que solo cristalizan el status quo.
Ernesto Tenembaum ha prohijado la peor de todas las traiciones, que es la traición a si mismo. Por 30 monedas o mejor dicho por 200 lucas mensuales, de la nueva casi amarilla denominación.
El CEO, o gerente general o dueño, que sé yo, se llama
Héctor Magneto
Los argentinos casi no le conocen la cara pero el se jacta de decir que desde hace 20 años es el Presidente en la sombra de la Republica Argentina.
Por eso pibe que estas estudiando, mama que les estas dando la teta al nene, viejo que estas en el hospital, obrero del turno noche de la fabrica, o simplemente vos que vas en el auto o el camión escuchándome, si queres que haya en Argentina, democracia con justicia social vas a tener que elegir en Octubre entre Kirchner o Clarín. Vos decidís.
...Ah me olvidaba, Luis D’Elia y Carlos D’Elia, en realidad son una puta casualidad.
Posdata: Clarín es Canal 13, TN, Canal 12 de Córdoba, Canal 7 de Bahía Blanca, Canal 6 de Bariloche, Radio Mitre y sus repetidoras, F.M. la 100 y sus repetidoras, Diario Ole, Expoagro, Expo Argentina Educativa, Clarín Grafica, Revista Ñ, Diarios Los Andes, La Voz del Interior, Agencia DyN, Papel Prensa, Cablevisión, Direc TV, Fibertel Sociedad Anónima, Ciudad, Flash, Fullzero, Gontel S.A., Telecentro S.A., Arte Radiotelevisivo Argentino (ARTEAR), Volver, Metro, Pol-ka producciones, Ideas del Sur, Patagonic, Canal Rural Satelital, etc., etc., etc.
Compañero Luis Angel D`Elía
Presidente de la Federación de Tierra y Vivienda (FTV)
Secretario General de la Central de Movimientos Populares (CMP)
Secretario General de la Central de Movimientos Populares (CMP)
Editorial del Compañero Luis D’Elía del 10 de Marzo de 2009. Programa “A boca de jarro” que se emite por AM740 Radio Cooperativa de Lunes a Viernes de 22:30 a 24hs.Conduce: Leonardo Cofre.
lo leímos en: http://ahoradigo.blogspot.com/
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